¿Cuántas veces, sin razón o motivo en particular, se presenta una situación que ilumina el camino hacia una idea de negocio? Estos momentos afortunados pueden ser pocos en la vida de una persona. Dejarse llevar por la ilusión de iniciar un negocio propio suele ser muy atractivo, pero ¿cómo se toma finalmente la decisión de emprender algo que realmente valga la pena? Muchos opinan que pasar de una idea a un negocio en marcha es el resultado de combinar una buena actitud con las herramientas y técnicas empresariales adecuadas. Convertirse en emprendedor o empresario implica haber encontrado la forma de hacer realidad esa idea de negocio, siendo consciente tanto de las fortalezas que puede aprovechar como de las debilidades que necesita suplir.
El avance de los emprendedores depende de varios factores, influenciado por oportunidades que juegan a su favor o por adversidades que dificultan la creación de un negocio. Deberán pasar por una serie de etapas para alcanzar sus propósitos. Sin embargo, uno de los primeros pasos fundamentales es asegurarse de que la idea de negocio sea viable y factible en el contexto actual. Desarrollar un Plan de Negocios es la mejor manera de comprobarlo.
Empecemos por lo primero: que es un Plan de Negocios
Un Plan de Negocios puede contener numerosos datos para describir todas las áreas de un posible negocio. Sin embargo, crear un documento demasiado extenso podría dificultar su ejecución. La practicidad es el mejor filtro. El Plan debe funcionar como el mapa de ejecución del negocio. Limítate a incluir en el Plan lo que realmente consideras capaz de lograr.
Estudio de mercado
Debes tener claro cuántas personas potencialmente estarán dispuestas a comprar o solicitar lo que ofreces dentro del área geográfica en la que decides ubicar el negocio. Es una forma de definir tu nicho de mercado. ¿Cómo se comportan estas personas? ¿Qué precios están dispuestas a pagar? ¿Qué desean en su vida diaria? ¿Qué tipo de problemas o necesidades tienen que tu negocio podrá resolver o satisfacer?
Plan de compras
¿Cuáles serán los proveedores los que abastecerán los objetivos de tu negocio? ¿Cómo influyen en tus costos y gastos? ¿De qué forma trabajan? ¿Qué tan disponibles están para atender tus requerimientos? ¿Dónde están ubicados? ¿Exigen una compra mínima? ¿Qué formas de pago pueden negociar? De ser necesario, ¿quiénes serán tus proveedores sustitutos? ¿Qué tipo de materiales se requieren para iniciar? ¿Cómo aseguras la calidad de su servicio? Recuerda que si ellos fallan, tus clientes y tu servicio serán los afectados.
Plan de mercadeo
¿Por qué medios de comunicación darás a conocer el negocio? ¿Qué mensaje deseas transmitir al posicionar tu negocio en la mente de las personas? ¿Cuáles son las características de tu producto o servicio? ¿De qué manera podrá la audiencia acceder o solicitar tus productos o servicios? ¿Qué tipo de publicidad maneja tu competencia? ¿Qué volumen de ventas estimas recibir al mes y durante un año? ¿Quién será el responsable del manejo publicitario? ¿Qué precios acepta normalmente el mercado para negocios de tu tipo?
Recursos humanos
¿Cuántos empleados necesitará el negocio para operar de manera mínima? ¿Qué tipo de salario recibirán? ¿El negocio requiere licencias o permisos? ¿Cuáles son las responsabilidades legales que conlleva? ¿Qué habilidades o competencias se requieren para que el negocio funcione correctamente? ¿Serán necesarios uniformes para identificar al equipo de trabajo?
Plan financiero
¿Cuál será el presupuesto de gastos? ¿Cuánto dinero se necesita para iniciar y mantener las actividades durante al menos un año? ¿Qué tipo de inventario, maquinaria, equipos o licencias se necesitarán? ¿En qué momento se asignará a la persona que llevará el control contable?
Toma en cuenta que un Plan de Negocios no solo brinda claridad y seguridad al momento de emprender, sino que también es uno de los documentos más importantes para conseguir financiamiento. Responder estas preguntas clave demostrará cómo tu Plan generará un flujo de ingresos, no solo para sostener el negocio durante los primeros años, sino también para justificar la capacidad de asumir un crédito.
Ser emprendedor o empresario no es un título que podemos autoimponernos, ni es una característica visible en el exterior de una persona. Emprender no está limitado por el tiempo, género, edad ni nivel de escolaridad. Requiere disciplina, atención a todas las áreas de la empresa, y dedicar tiempo y esfuerzo a cada parte, ya que de ellas dependerá el éxito del negocio.
No preparar un Plan de Negocios podría convertir el recorrido de la idea en una carrera de obstáculos que lleve al desencanto. Sentar las bases de un buen Plan de trabajo ayudará a que el emprendedor con la motivación y las habilidades necesarias convierta su idea en una oportunidad de negocio rentable.
