La historia de Yesenia es inspiradora. A continuación, su relato de cómo logró salir adelante para mantener su negocio en medio de la pandemia y enfrentar grandes problemas familiares.
Negocio cerrado en un 99%
“La pandemia de COVID-19 provocó el cierre del 100% de las operaciones de mi empresa, Crearte Producciones, dedicada a la producción de eventos,” comenzó Yesenia de Colato al iniciar la entrevista.
En marzo de 2020, la empresa iba muy bien; alcanzaba sus objetivos y las ventas crecían a un ritmo mayor que en 2018 y 2019. Sin embargo, de un día para otro, el 21 de marzo, tuvo que cerrar operaciones debido a las restricciones de distanciamiento físico y social, junto con todas las limitaciones adicionales impuestas por la pandemia.
Crearte Producciones, su empresa, había logrado antes de la pandemia un crecimiento y posicionamiento gracias a contratos para prestar servicios a grandes compañías como Shell, Cadbury Adams, Kraft Foods, Pfizer, Banco Uno, Fovial, LNB, Telefónica Movistar, Mondelez, C Imberton, Rodio Swissboring, entre otras no menos importantes. Estos contratos se vieron completamente afectados por la difícil situación de cuarentenas que vivió el país durante varios meses.
Yesenia comenta: “Pasamos abril, mayo y junio de 2020 sin poder facturar más que el 1% de un contrato que aún teníamos, el cual fue cancelado en julio. Cada día nuestros ingresos disminuían más y nuestras finanzas se deterioraban”. Paralelamente a esta crisis de ingresos, tuvo que enfrentar otros desafíos, ya que en abril estuvo en cuarentena por un viaje que había realizado fuera del país. La situación se agravó debido a una peritonitis que sufrió su esposo, quien tuvo que ser operado de emergencia en la primera semana de mayo y nuevamente en junio por complicaciones. “Gracias a Dios mi esposo se recupera bien de la segunda cirugía”, añade Yesenia.
Al salir de la crisis de salud de su esposo, nos cuenta: “No sabía qué hacer con la empresa. Había pasado mucho tiempo en hospitales y no tenía ni el tiempo ni la mente clara para pensar en cómo salir adelante”.
Reflexión y aprendizaje a partir de una asesoría
Yesenia destaca que en esos momentos fue muy útil lo aprendido en el programa MBA (Método Base de Aceleración) que cursó entre abril de 2019 y febrero de 2020.
Se inscribió en el programa “ante la búsqueda constante de la excelencia y eficiencia en nuestros servicios, procurando generar mayores ingresos. Conocí a FUSAI a través de Facebook y, sin dudarlo, me inscribí para participar en el proceso de selección para obtener una beca del programa MBA”.
Yesenia fue seleccionada y rápidamente descubrió la importancia de trazarse objetivos específicos. Realizó un “proceso de transformación empresarial en las áreas de organización y finanzas”, con el objetivo de sentar bases que le permitieran innovar y acelerar el crecimiento de su empresa de manera ordenada.
En junio de 2020, FUSAI contactó a Yesenia para ofrecerle una beca para participar en el programa “Activación empresarial en época de crisis”, dirigido al grupo Alumni, conformado por empresarios que han cursado el programa MBA.
“El contenido del programa estaba enfocado en cómo reinventarnos, conservar a nuestros empleados, mantener nuestra cartera de clientes y cómo aprovechar los activos de la empresa para generar ingresos”, comenta Yesenia.
“Nunca olvidaré el 15 de julio, cuando tuve una sesión con la Coach Adriana de FUSAI, y ella me cuestionaba: ¿qué activos tiene? ¿cómo los puede usar? Yo le mencioné que tenía camiones, una panel, vehículos, materiales para decoración, sonidos estacionarios, máquinas de palomitas, máquinas para elaborar sorbete, etc.”
“Le conté que habíamos hecho un FODA con los empleados y mi familia, el cual sirvió para identificar la oportunidad de ofrecer servicios de traslado de carga usando los camiones. Nos enfocamos en los camiones, y la coach me motivó a evaluar esa oportunidad que se veía muy factible, ya que era una actividad que no había cerrado operaciones durante la pandemia.”
“Iniciamos con un anuncio en redes sociales, WhatsApp e Instagram, y realizamos algunos traslados de muebles y ladrillos. Tuvimos buena aceptación con el servicio; sin embargo, los ingresos no eran suficientes para cubrir todos los gastos que teníamos.”
“Hicimos presupuestos, ofertamos el servicio de traslado de carga, tocamos algunas puertas, hicimos publicidad del servicio y, poco a poco, obtuvimos más clientes y adquirimos experiencia en ese nuevo rubro empresarial.”
Agrega: “También surgió la idea de hacer paquetes de decoración para celebraciones en casa, ya que por las restricciones de la pandemia muchas familias celebraban cumpleaños y ocasiones especiales en confinamiento. Comenzamos elaborando decoraciones para eventos en casa, al principio gratis, para dar a conocer ese nuevo servicio y atraer clientes. Hasta el día de hoy, nos contratan para realizar dichas decoraciones, vendemos globos con helio y utilizamos los materiales y arreglos que teníamos antes de la crisis del COVID-19.”
“Aplicando lo que nos enseñaron en los programas, negociamos con aliados estratégicos y logramos una reducción en el costo de la renta del local por seis meses; no despedimos a ningún empleado. Desde el 27 de julio conseguimos un contrato para repartir alimentos con una empresa autónoma, y los tres camiones que tenemos siguen generando ingresos. En el rubro de las decoraciones, obtuvimos dos importantes clientes: PriceSmart y un candidato a alcalde. En este mes de septiembre ya contamos con nuevos clientes, y los de nuestra cartera están regresando”.
“Estoy infinitamente agradecida con Dios y con el apoyo recibido. Sé que lo aprendido me servirá ahora y siempre”, concluye Yesenia.